Desde hace algunos meses, la Vicaría Pastoral Social de la Diócesis de Chillán ha estado trabajando en un proyecto de reinserción social. Se trata de ofrecer talleres laborales tanto en la Cárcel de Hombres de Chillán, como en la Cárcel de Mujeres que está ubicada en Bulnes.
En el verano pasado, la hermana Patricia Martínez, delegada de la Vicaría, visitó junto a su equipo y a Gendarmería los lugares en donde se impartirán estos talleres que tendrán una duración de seis meses.
Ahora, ya están listos para comenzar, tal como lo explica el secretario ejecutivo de la Vicaría Pastoral Social, Mauricio Águila. “Estamos muy contentos porque dimos inicio a este proyecto. En Chillán vamos a hacer un taller de talabartería en cuero para hacer carteras, cinturones y lo que tradicionalmente se trabaja en cuero, perfeccionando las técnicas en diseño, corte y confección. En la Cárcel de Mujeres vamos a trabajar un Taller de Corte y Confección. También tendremos un taller para las mamás o futuras mamás de tejido de ropa de bebé. Los fondos salen desde la misma Vicaría Pastoral Social”.
En total, serán 54 los reclusos y reclusas beneficiados con este proyecto. “En la Cárcel de Hombres son internos quienes van a dictar el curso, y que han aprendido el oficio. En el caso de Bulnes, serán profesoras externas”.
“El trabajo con Gendarmería se ha desarrollado de forma muy fluida. El vínculo ha sido muy bueno y ellos están muy atentos a cualquier taller que se pueda dictar dentro de la cárcel, porque saben que es una forma también de bajar los niveles de estrés tanto de los internos como de ellos mismos, nos han habilitado los espacios, facilitarnos el ingreso”, agregó Mauricio.