Con la presencia de representantes de establecimientos educacionales y de voluntariado de la Diócesis de Chillán, la Vicaría Pastoral Social conmemoró el Día de la Solidaridad en la fiesta de San Alberto Hurtado con una misa en la Catedral de Chillán, celebración que fue presidida por el párroco de El Sagrario, padre Luis Flores.
En su homilía, el padre Luis señaló que “estamos celebrando el Día del Señor, el Día Nacional de la Solidaridad y la Fiesta de San Alberto Hurtado. Estos acontecimientos nos permiten celebrar a Alberto Hurtado como Santo. Ha sido una especie de regalo poder celebrarlo en este domingo. De alguna manera, el Evangelio de hoy dibuja a grandes rasgos a una persona como tiene que ser de manera ideal y lo que nosotros vemos con claridad es que Jesús, cuando habla de alguien que se alimenta del Pan de Vida, se refiere ciertamente al Padre Hurtado que cumple con ese llamado de vivir alimentados de Dios”.
“Para nosotros los santos nos resultan algo lejanos. Tener a Santa Teresita de Los Andes, al Padre Hurtado y a todos quienes están en camino y que llevan nuestra nacionalidad es la forma en que Dios nos demuestra a través de estas personas que todos estamos llamados a vivir de esa manera, a hacer un camino similar. En lo esencial, se trata de vivir lo que Jesús ha venido a anunciar y que hace tanto bien a los demás”, precisó el padre Luis.
El párroco de El Sagrario recordó además hitos importantes en la vida de San Alberto Hurtado, incluyendo sus inicios sacerdotales en el Seminario de Chillán. De igual forma, agradeció a las autoridades presentes en la misa, a los voluntarios de distintas entidades sociales de la región, a los colegios, a la sociedad civil, el trabajo que desarrollan. “Cuando alguien se alimenta de Dios, es la sociedad la que se ve favorecida. En la vida de Alberto Hurtado este pan de vida, se hizo vida en su apostolado por los niños, en los intelectuales (fue el primer doctor en ciencias de la educación). Fue director de una revista vigente, un abogado que se preocupó por la situación legal de las empleadas de casas particulares. ¿Cómo lo hacía? Se alimentaba de un pan que da vida para todos y hoy estamos llamados a entender que, junto con celebrar y dar gracias a Dios por este hombre bueno y santo, también tenemos que comprometernos a poner el centro en quienes nos rodean”, señaló.
Al finalizar, el padre Luis bendijo los estandartes tanto de los establecimientos educacionales como de los voluntariados presentes en la celebración como el Hogar de Cristo, la Cruz Roja, la Defensa Civil, Fray Andresito, entre otras.