Con una emotiva ceremonia de certificación, la Vicaría Pastoral Social de la Diócesis de Chillán dio por finalizados los talleres “Manos de Esperanza” en el Centro Penitenciario Femenino de Bulnes, instancia formativa que benefició a un grupo de internas a través de dos cursos: uno de Corte y Confección y otro de Tejido para Bebés.
La iniciativa, desarrollada en convenio con Gendarmería de Chile, busca entregar herramientas concretas de capacitación a personas privadas de libertad, permitiéndoles generar ingresos y continuar siendo un sustento para sus hogares, aun en condiciones de reclusión.
La ceremonia de cierre contó con la participación de las alumnas, las monitoras de los talleres, representantes de la Vicaría Pastoral Social y funcionarios de Gendarmería, quienes valoraron la dedicación y compromiso de las participantes.
“Estos espacios formativos no solo entregan herramientas técnicas, sino también esperanza y dignidad”, señalaron desde la Vicaría, reafirmando su compromiso con la reinserción social efectiva a través del acompañamiento humano y profesional.
Actualmente, el programa “Manos de Esperanza” continúa su desarrollo con un nuevo taller de Talabartería que se encuentra en ejecución en la cárcel de hombres de Chillán.