La mañana de este sábado 250 agentes pastorales se dieron cita en el Instituto Santa María para participar del inicio del Programa de Formación de Agentes Pastorales, bajo el nombre de Ministros Laicos al Servicio de la Misión, una instancia de capacitación que durará un año y que tiene por objeto formar a agentes pastorales para colaborar en el servicio comunitario y misionero en las realidades eclesiales presentes en la Diócesis de Chillán.
La jornada estuvo encabezada por el administrador apostólico de la Diócesis, padre Sergio Pérez de Arce, quien indicó que este programa de formación está incorporado en las Líneas Prioritarias Pastorales. “Apunta a formar a un grupo grande de laicos para que colaboren en la misión. No solo estarán al servicio de la liturgia, sino también animando comunidades, ayudando en la formación de otras personas, acompañando a los que sufren, a los enfermos, entre otras tareas”, dijo.
Los cuatro decanatos de la Diócesis comenzaron juntos este programa. En lo sucesivo, trabajarán por un año separados por Decanato reuniéndose una vez al mes. “Durante este tiempo trabajarán distintas temáticas como la formación teológica pastoral, la formación para el liderazgo, la sagrada escritura y la vida espiritual. Comenzamos con la Exhortación Apostólica del Papa Francisco, Evangelii Gaudium (la Alegría del Evangelio), porque es un texto que hace una propuesta de renovación de la Iglesia. Lo que nos interesa es ir trabajando en la renovación eclesial que el Papa Francisco señala como algo que tenemos que hacer como forma impostergable. Trabajar una Iglesia más misionera que pueda salir al encuentro de las personas”, indicó.
El administrador apostólico, además, señaló que la convocatoria sobrepasó con éxito las expectativas de los organizadores de esta actividad. “Es una buena noticia que haya interés y que los diferentes organismos de la Iglesia, como parroquias, grupos y colegios, se hayan interesado en participar”, precisó.
Asistentes
Carola Villalobos, profesora de Religión del Instituto Santa María, señaló que “instancias como estas son fundamentales para este cambio que necesitamos como Iglesia. Tenemos que tener una mente y corazón abiertos para acoger a todas las personas que sienten el llamado del Señor. No nos podemos quedar en las crisis. Estas sirven para pararnos de una manera distinta, perdonándonos, y siendo acogedores. Esta es una invitación del Señor a ser instrumento de Él en nuestra Iglesia.
Por su parte, Néstor Villarroel, de la Capilla San Francisco de Asís, dijo que “este encuentro era muy necesario para trabajar y renovar la Iglesia. Los laicos tenemos que hacernos parte de este proceso porque somos muchos los que queremos sacar adelante a nuestra Iglesia. Seguro será un largo camino, pero estoy seguro que será importante para todos”, dijo.