El pasado sábado 18 de julio se activó la Casa de Ejercicios Tabor, perteneciente al Obispado de Chillán, como Residencia Espejo Transitoria (RET), para garantizar condiciones de cuidado y aislamiento a personas mayores enfermas de Covid o que presentan síntomas sospechosos de la enfermedad.
El proyecto está a cargo del Servicio Nacional del Adulto Mayor (SENAMA), actuando el Obispado solo como facilitador de las dependencias. La residencia tiene una capacidad de 40 camas, y en los primeros días ingresaron seis personas, derivadas de Hogares donde hubo brotes de coronavirus, con el fin que puedan vivir un período de cuarentena con los cuidados adecuados.
En otra parte de la Casa Tabor, alojan desde hace cerca de un mes algunos militares que están prestando servicios en Ñuble, como forma de descomprimir el uso de las dependencias de Regimiento de Chillán.